Cada noche, a la misma hora, se presentan
Vestidos de un negro rigurosa
Y, con destellos de plata
La luna y las estrellas vigilan su entrada
Permanezco bajo la cobija nocturna de sus miradas
Con los ojos bien abiertos
Inmovilizada por el terror que me produce su llegada
Al final de la obscura transparencia
Desaparecen
Permanezco inmóvil
Hasta que la luz deslumbra
Entonces… Cierro los ojos
Y, te sueño, como antes
Como antes de que…
Desaparecieras en la oscuridad de la noche
Rebeca Harfuch