Cuantas veces nos hemos metido en problemas con los demás por andar de metiches dando nuestra opinión que quizá no pidieron o que si lo hicieron no fue de manera tan personal. Tampoco digo que hay que cuidar hasta el último punto y coma que se dice, todas las personas tienen derecho a decir lo que les venga en gana, sin embargo tenemos que aceptar que a veces exponemos más de lo que deberíamos y eso a la gente le molesta o se lo toma, como ya dije, de manera personal.
El asunto es, ¿por qué exponemos más de lo que nos están preguntando? En mi opinión cuando lo hacemos tendemos a caer un poco en el juicio, lo que genera de una manera velada o descarada querer que los otros hagan lo que nosotros queremos porque, claro, nuestra idea es mejor. Quizá nuestra idea sí sea mejor, quizá ver las cosas desde afuera nos brinda una mejor perspectiva, o nuestra misma experiencia nos da conocimiento para poder opinar o dar consejos. Lo que no creo que esté bien querer controlar situaciones o como dije anteriormente, pretender que los demás hagan lo que uno quiere. Independientemente de las decisiones que tomen las personas que están cerca de nosotros, por más cariño que exista o miedo a que la vayan a regar, es mucho mejor respetar las decisiones de los demás y quedar pendientes por si piden nuestra ayuda.
Desde luego para no caer en situaciones de las que después podemos salir raspados y frustrados, lo mejor es que cada quien viva su vida lo mejor que pueda. Cuando uno se ocupa de vivir su propia vida no le queda mucho tiempo para andar viviendo la de otros. El problema viene cuando no queremos ver nuestros propios problemas o situaciones y por eso nos andamos metiendo en asuntos ajenos, pero al final sale peor la cosa, no arreglamos ni lo propio ni lo ajeno y sí podemos caer en conflictos desagradables.
Si algo he entendido bien en la vida es que yo no puedo cambiar a los demás y mucho menos pretender que hagan lo que yo quiera, por supuesto a veces se me olvida, pero también constantemente lo recuerdo y me ha permitido vivir y resolver con más rapidez conflictos que sólo desgastan la mente y me apartan de lo que realmente vale la pena en la vida.
Vive y deja vivir
.
Twitter @reginakur