Dicen que uno de los mejores amigos del hombre es el perro, fiel y seguidor. Hasta ahora no he tenido uno, y pienso que sería una gran idea adoptar una mascota, claro, será un perro.
Es todo un rito salir al parque, y ver como la gente les habla a sus mascotas, les explica, a esos peludos que parecen como unos niños, torpes con sus instintos, amorosos por naturaleza, defienden lo suyo sin pensarlo y son buenos hermanos inseparables.
Los perros para muchos son un problema de salud pública, sobretodo los perros callejeros, cuando no están vacunados, no tienen dueños que los vacunen, obviamente su medio de sobrevivencia se vuelve duro y desafortunado.
Sabían ustedes que muchos de estos perros enfrentan problemas de la ética humana, como envenenamientos, atropellos o son ahorcados. Muchos otros son abandonados, una perra en tan sólo su primer camada tiene 16 perros de los cuales 8 son hembras, y éstas a su vez se reproducen. Entonces díganme, quién cuida a tantos animales en esta ciudad, con su ritmo de vida tan atropellado.
Cuántas veces nos ha tocado ver a un perro sobre le pavimento, ¡atropellado! En las ¡carreteras! Es una situación triste la que viven estos animales, y poca nuestra educación para saber cómo ayudarles y convivir con ellos.
Sobre la avenida Insurgentes, cómo si llegáramos de Cuernavaca a la Ciudad de México, hay una hermosa estatua en el costado derecho, en homenaje al "Perro Callejero", (con mayúsculas) es una de mis favoritas en esta Ciudad.
Por: Haidi Ramos Cadena.
