Uno de los objetivos más recurrentes a iniciar el año es eliminar esos kilos de más. Ya sea por razones de salud o estética, muchos deciden suscribirse a un gimnasio y cambiar su dieta al iniciar el año. Sin embargo, no falta quien a mitad de año ha desistido y reinicia el ciclo con el siguiente año nuevo. Para que esto no te pase, no olvides considerar lo siguiente.
- No basta con establecer una meta, es necesario determinar los pasos a seguir para lograrlo.
- Plantéate un objetivo realista ¿cuánto puedes bajar en cuanto tiempo y de forma saludable?
- No busques resultados inmediatos, enfócate en lograr un cambio de hábitos que estés dispuesto a adoptar por el resto de tu vida.
- Evita las dietas restrictivas, se trata de aprender a alimentarte mejor, no de tener una pérdida rápida para que luego venga el rebote.
- No te saltes el desayuno, haz colaciones y cena ligero.
- Asegúrate de que tu dieta sea equilibrada. Un nutriólogo te puede ayudar a determinar la mejor forma de alimentarte.
- Haz un seguimiento de tu evolución, pero no te obsesiones con la báscula. Es más importante cómo te sientes –¿más ligera? ¿más activa? ¿con la piel más suave?– que un número.
- Procura tener a la mano colaciones para no quedarte con hambre y nunca vayas al súper si no has comido antes.
- El ejercicio es indispensable, encuentra uno que te guste y que no resulte un sacrificio hacer. Vale la pena intentar varías cosas hasta encontrar el ejercicio para ti.
- Recuerda que perder peso te llevará tiempo, así que intenta ser paciente.
Escrito por: Elena Pedrozo